Tortuga verde
Información taxonómica
Dominio: Eucariota
Reino: Animalia
Phylum: Chordata
Clase: Reptilia
Orden: Testudines
Familia: Cheloniidae
Género: Chelonia
Especie: C. Mydas
Nombres
Español: Tortuga Verde o Blanca (en Golfo de México y el
Caribe mexicano), Tortuga Prieta o Negra (en Pacífico mexicano) Peje Blanco
(Puerto Rico).
Inglés: Green turtle Nombre científico: Chelonia mydas
(Linnaeus, 1758).
Descripción
Las subespecies C. m. mydas y C. m. agassizzi actualmente se
consideran inválidas; la ciencia aún está debatiendo si las poblaciones del
Pacífico Oriental y las del Atlántico Norte son subespecies o especies
separadas. La Tortuga Verde es la única especie de tortuga marina que se le ha
visto asolearse fuera del agua. Es de tamaño grande, su caparazón es de forma
ovalada y los juveniles tienen una quilla que desaparece con la edad
volviéndose el caparazón más aplanado. Su carapacho se distingue por tener
cuatro escudos costales de cada lado. Su cabeza es relativamente pequeña y
chata, con dos escamas prefrontales y cuatro escamas detrás de los ojos. El
pico es romo y sin gancho, con el borde de las mandíbulas aserrado,
principalmente la inferior. Como en las otras tortugas marinas, las aletas
delanteras son más largas que las traseras, tienen forma de remo que termina
más o menos en punta. En los bordes anteriores de sus aletas tienen una uña
curveada. Su cola es cónica y más larga en el macho sobresaliendo notoriamente
del carapacho. Se le llama Tortuga Verde porque la grasa corporal de su cuerpo
es verdosa. El color de su cuerpo es variable. Las crías son oscuras con el
borde de las aletas y el vientre de color blanco. La concha de los juveniles es
café rojizo a verde oliva; cuando son adultas se vuelven café oscuro con
patrones de manchas y rayos de varios tonos, con el vientre amarillento. Las
tortugas marinas poseen glándulas de la sal que se encuentran en las órbitas
oculares y que secretan continuamente un líquido espeso salino, cuya principal
función es eliminar el exceso de sal en el cuerpo y de proteger los ojos de la
arena cuando salen a desovar. Su longitud y peso varía según su distribución,
para México se han registrado de entre 71 y 139 cm de largo, con un promedio de
94 cm. Su peso se ha registrado entre 68 y 235 kg. Hay un reporte para esta
especie en el Mar Caribe de un individuo que pesó 395 kg como el máximo
conocido.
Distribución
La Tortuga Verde vive en los Océanos Pacífico, Atlántico e
Índico, donde la temperatura no descienda por debajo de los 20°C, como en la
franja tropical y subtropical y parte de la templada. Los machos nunca dejan el
mar y las hembras salen a desovar en diferentes playas del mundo. Algunos consideran
que una subespecie se distribuye en el Mar Mediterráneo. En el Océano Pacífico
mexicano anidan en costas de Baja California, y desde Sinaloa a Chiapas, con
mayor abundancia en Michoacán en playas de Colola y Maruata y en las Islas
Clarión y Socorro del Archipiélago Revillagigedo. En el Golfo de México y Mar
Caribe anidan en Tamaulipas, Veracruz, Campeche, Yucatán y Quintana Roo. Es
marina y vive entre zonas costeras y pelágicas (de mar abierto). Cuando son
crías viven en mar abierto, y los juveniles y adultos en la zona nerítica, como
arrecife coralino, lecho arrecifal, pastizales marinos, etc. La zona nerítica
es la parte marina de los 10 a los 200 m de profundidad, que cubre la
plataforma continental hasta sus bordes y es la más productiva en el mar. Parte
del hábitat utilizado por las hembras son las playas arenosas donde deposita
sus huevos y nacen las crías. No existen datos concretos sobre el tamaño
poblacional mundial de ninguna especie de tortuga marina. Existe la tendencia a
evaluar el tamaño de la población de las tortugas marinas, en función de los
nidos contabilizados y el promedio de huevos depositados por cada hembra, o
incluso en función de la cantidad total de hembras registradas en varios sitios
del mundo. Esto tiene varios inconvenientes, principalmente porque no todos los
gobiernos de los países donde se distribuyen las tortugas marinas tienen
programas de protección y monitoreo, y porque varios aspectos del ciclo de vida
de las tortugas se desconocen. Por lo tanto los datos son solo estimaciones
parciales. Por otra parte, sí se sabe que en general, las poblaciones están
disminuyendo. En el año 2004, la UICN (Unión Internacional para la Conservación
de la Naturaleza) publicó sus resultados de un análisis en las tendencias
poblacionales en 32 sitios en el mundo y para el año 2001 calculaba una
población mundial de 88,449 hembras anidantes. Esto significaba una declinación
de entre 48-65% respecto de datos históricos de los últimos 100 a 150 años.
Hábitos
La Tortuga Verde suele salir del mar para tomar el sol en
islotes y playas aislados. Igual que otras especies de tortugas marinas, tiene
la habilidad de regresar a la playa donde nació con una precisión sorprendente
viajando para ello cientos e incluso miles de kilómetros. Las hipótesis para
explicar este extraordinario comportamiento incluyen, la precepción de
corrientes marinas, gradientes de temperatura, memorización de la configuración
de la playa, el sonido característico del oleaje en una playa y el olor de la
arena y su humedad entre otros factores. Los juveniles de Tortuga Verde son
omnívoros, es decir comen de todo, medusas, cangrejos, esponjas; caracoles y
gusanos. En cambio, los adultos son exclusivamente herbívoros y solo comen
plantas del fondo arenoso (Zoostera spp., Thalassia spp., y Posidonia spp.),
que en conjunto les llaman pastos marinos. También puede alimentarse de algas y
moluscos. Se reproduce normalmente cada dos o tres años, aunque esto puede
variar según las condiciones de disponibilidad de alimento y retrasarse un año
o más. La época de desove puede ser durante todo el año, aunque la temporada
para las del Pacífico mexicano es de agosto a enero y para las del Golfo de
México es entre mayo y septiembre. La fecundación es interna y el apareamiento
es en el mar. El macho posee un órgano llamado hemipene con el cual deposita el
esperma en el fondo de la cloaca de la hembra. La Tortuga Verde prefiere
desovar en playas abiertas, generalmente protegidas por arrecifes, y barreras
rocosas en zonas de relativa baja profundidad; a veces aisladas en bahías, que
pueden ser insulares o continentales, con poca pendiente o un poco más de entre
5 y 10° de inclinación, de mediana o baja energía en el oleaje. Va más allá de
la línea más alta de mareas, adentrándose y buscando espacios libres de
vegetación y a veces realiza varios intentos antes del nido definitivo. El nido
de las tortugas marinas es un hoyo con forma de cántaro que se encuentra en la
parte posterior de la cama, que es una oquedad ovalada, excavada con sus aletas
donde reposa el cuerpo mientras desova. En la Tortuga Verde el nido es más
profundo que para los otros géneros de tortugas, excepto el de la tortuga laúd.
En una granja tortuguera de Gran Caimán en el Caribe, se observó en esta
especie un ciclo de anidación de 1.6 años, con un promedio de cinco a siete
puestas, con 118 huevos en promedio para cada desove con intervalos de 10 días
entre cada uno. En México se ha reportado que el número promedio de huevos por
puesta es de 125. Los huevos se incuban por un tiempo de entre 45 y 70 días,
influyendo para ello la temperatura de la arena. En una temperatura ideal de
alrededor de 28° C la proporción de sexos es del 50%. A partir de que
eclosiona, alcanza su madurez sexual hasta que cumple entre 10 y 50 años.
Conservación
Varios países en el mundo poseen una fuerte legislación para
la protección de las tortugas marinas y existen leyes internacionales que las
protegen. Aún así, se sigue realizando su pesca ilegal, continúa ocurriendo su
captura incidental, y la depredación de sus huevos por el ser humano, siendo
estas sus principales amenazas. Otra amenaza importante es la contaminación del
mar, que va desde basura que termina a la deriva en el mar, hasta contaminación
sonora por grandes embarcaciones, o por derrames de aceites, combustibles y
otras sustancias nocivas que afectan los ecosistemas marinos. Así mismo, el
calentamiento global, cuyo origen se encuentra en el aumento de carbono en la
atmósfera, a su vez consecuencia de las actividades humanas. Una perturbación
menos conocida, pero no menos importante, es la iluminación artificial causada
por construcciones humanas, en las zonas de playa donde nacen las tortugas, las
que se desorientan para alcanzar el mar, a veces provocando una alta mortalidad
en las recién eclosionadas tortuguitas. En algunos sitios del mundo esta
especie es amenazada por una enfermedad llamada fibropapilomatosis,
caracterizada por el crecimiento de enormes tumores internos y externos que
llegan a afectar muy seriamente órganos y apéndices de las tortugas marinas.
Sin embargo, se ha documentado que algunas Tortugas Verdes se han recuperado de
la enfermedad. Estados Unidos reporta que después de la Tortuga Golfina y la
Tortuga Laúd, la Tortuga Verde era la más afectada por capturas incidentales en
sus aguas territoriales del Pacífico en la pesquería del atún. La pesquería se
cerró por orden federal, y después de implementar medidas preventivas para la
captura de tortugas marinas, la pesquería se re-abrió en 2004, reduciendo hasta
en un 90% su captura. Desde 1968, la entonces, Secretaría de Comercio
implementa reglas de captura, uso y comercio para las tortugas marinas. Entre
1971 y 1972 se prohibió la pesca de cualquiera de las especies por dos años,
excepto a algunas cooperativas que se concesionaron. En 1990 se refrendó la
veda de todas las especies de tortugas marinas en México. En 1998 México se
adhiere a la Convención Inter-Americana de Protección y Conservación de
Tortugas Marinas. Ya en este siglo, en 2001 se incrementa en el Código Penal a
12 años de prisión, como pena máxima por la captura ilegal de tortugas marinas.
En julio de 2004, fue decretado en Estados Unidos, el “Marine Turtle
Conservation Act”, para proteger y preservar las tortugas marinas en el mundo.
A partir de 2005, la Tortuga Verde es una de las 51 especies del Programa de
Conservación de Especies en Riesgo (PROCER). El 2007 fue el Año de la Tortuga
Marina, de donde se desprende la Reunión Nacional sobre Conservación de
Tortugas Marinas en noviembre del mismo año, que compiló ponencias, talleres y
carteles sobre las tortugas en México. Los principales esfuerzos realizados
para conservar al grupo de tortugas marinas que arriban a México, incluyen su
estudio por diversas instituciones educativas y de investigación, la
promulgación de leyes y acuerdos para la veda total y permanente de todas las
especies, la regulación de actividades que de una forma u otra perjudican
contaminando o perturbando el ambiente marino o sus ecosistemas y la creación de
campamentos tortugueros. En México existe una historia de algunas décadas, en
cuestión de campamentos tortugueros, sitios donde se colectan, resguardan, e
incuban huevos de tortuga marina para luego liberar al mar de forma segura, a
las tortugas recién nacidas. En 2007, México contaba con un total de 204
campamentos tortugueros, fijos o temporales, de los cuales 144 tenían con
autorización de la SEMARNAT. Otra actividad realizada en algunas comunidades y
regulada por la CONANP, es el ecoturismo por medio de la participación o solo
observación del nacimiento de tortugas y su dispersión al mar. En Veracruz el
programa de conservación de tortuga marina en el estado detectó hasta 2,260
nidos y un total de 534,053 crías de Tortuga Blanca como máximo en el periodo
de entre 1994 y el 2006. Sin embargo, a pesar del importante gasto económico
realizado para proteger a las tortugas marinas y sus playas de anidación, todo
este esfuerzo puede no fructificar en resultados positivos, si las naciones del
mundo no protegen y establecen medidas urgentes y definitivas para su
conservación. Debe considerarse como región prioritaria la playa de Cololoa, en
Michoacán, la cual es considerada históricamente como el sitio más importante
para desove de Tortuga Verde en el Océano Pacífico oriental.
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